TIPOS DE CLONACION:
- Clonación reproductiva: Es la que permite obtener individuos clónicos entre sí o con un progenitor.
- Clonación no reproductiva o con fines terapéuticos: Es la que tiene fines médicos, es decir, no pretende producir un individuo clónico vivo, sino producir tejidos y órganos necesarios para curar enfermedades tan graves como la leucemia o el parkinson.
Tipos de clonación según el método
- Partición (fisión) de embriones tempranos: analogía con la gemelación natural. Los individuos son muy semejantes entre sí, pero diferentes a sus padres. Es preferible emplear la expresión gemelación artificial, y no debe considerarse como clonación en sentido estricto.
- Paraclonación: transferencia de núcleos procedentes de blastómeros embrionarios o de células fetales en cultivo a óvulos no fecundados enucleados y a veces, a zigotos enucleados. El “progenitor” de los clones es el embrión o feto.
- Clonación verdadera: transferencia de núcleos de células de individuos ya nacidos a óvulos o zigotos enucleados. Se originan individuos casi idénticos entre sí (salvo mutaciones somáticas) y muy parecidos al donante (del que se diferencian en mutaciones somáticas y en el genoma mitocondrial, que procede del óvulo receptor).
Para que se pueda producir una clonación es necesario que pueda desarrollarse un organismo completo a partir de una porción de uno adulto.
TOTIPOTENCIA:
Capacidad de regenerar órganos completos a partir de partes del organismo. La totipotencia es mucho más infrecuente en animales. Sólo en los más simples se pueden observar ejemplos de ella: si una lombriz de tierra se corta en dos, cada una de las mitades puede regenerar la parte que le falta y dar lugar a una nueva lombriz. Algunos animales un poco más complejos tienen una totipotencia parcial que se manifiesta en la capacidad de regeneración de órganos perdidos.
En los últimos años, la clonación de animales ha tenido un mayor desarrollo porque se ha podido trabajar con embriones en vez de con individuos adultos. Los embriones, durante algunas fases de su desarrollo, son totipotentes y, por tanto, pueden ser utilizados para realizar clonaciones. Naturalmente esto puede verse en el caso de los gemelos idénticos: dos gemelos idénticos se forman porque en un momento muy al principio del desarrollo embrionario, el embrión inicial se partió en dos mitades y cada una de ellas pudo desarrollarse hasta llegar al individuo adulto..
Lo que ha ocurrido, durante estos últimos años, para que la clonación de animales se haya desarrollado es que ha sido posible fabricar embriones en el laboratorio (fertilizando óvulos con espermatozoides) y se han desarrollado las técnicas que permiten cultivar estos embriones fuera del útero durante un tiempo. De esta forma, es posible trabajar con embriones durante unas dos semanas, romperlos en dos e implantar en el útero los dos fragmentos que desarrollarán dos gemelos idénticos. De esta manera se pueden clonar animales; es decir: podemos producir gemelos idénticos a partir de un solo embrión. El número de veces que es posible romper un embrión no es ilimitado, por lo que también lo es el número de clones que es posible fabricar.
En el caso de humanos, las técnicas de clonación como las descritas no tienen aplicaciones prácticas razonables y, de momento, sólo pueden ser atractivas para personajes excéntricos o gente con poco conocimiento de la realidad del tema. Hay una variación del problema del clonaje en humanos que, sin embargo, sí tiene aplicaciones prácticas. Es el de la utilización de las CÉLULAS MADRE. Son aquellas células dotadas simultáneamente de la capacidad de autorrenovación (es decir, producir más células madre) y de originar células hijas comprometidas en determinadas rutas de desarrollo, que se convertirán finalmente por diferenciación en tipos celulares especializados.
CLONACIÓN TERAPEUTICA:
La principales investigaciones en CLONACIÓN TERAPÉUTICA HUMANA van dirigidas a conseguir tejidos para trasplante a personas adultas, MEDICINA REPARADORA, obviando el riesgo de rechazo.
La clonación terapéutica implica la destrucción posterior del embrión clonado del que se han extraído las células de la Masa Celular Interna, fuente de los tejidos para transplante.
La utilidad terapéutica que se pretende para dicha técnica busca tratar enfermedades causadas por degeneración de los tejidos o por su funcionalidad deficiente; la frecuencia de estas enfermedades está creciendo de modo paralelo al aumento de la edad media de la población de los países occidentales. Aunque, en algunos casos, pueda existir un tratamiento que alivie en parte la enfermedad (diabetes, Parkinson), la solución definitiva parece pasar por la sustitución de las células enfermas (muertas o desfallecientes) por otras que actúen adecuadamente, en suma, por el trasplante de cultivos de células que se integren en el enfermo y reemplacen la función deficiente de las células originales enfermas.
TECNICA DE CLONACION es necesaria para conseguir la compatibilidad de las células trasplantadas con el receptor, de modo que las defensas de este último no destruyan las células que le curarían. Para conseguir un trasplante de células compatibles con el enfermo se tendrían que dar los pasos siguientes:
- Tomar una célula del paciente y efectuar la clonación, de modo que se obtuviera un embrión humano (un nuevo ser humano en estado embrionario) genéticamente idéntico al enfermo.
- Cultivar en el laboratorio este embrión durante 5 ó 6 días, al cabo de los cuales se separan las células de su disco embrionario (con la muerte de dicho embrión). Esas células son las denominadas “células madre” o stem cells.
- Esas células separadas se deben tratar para evitar su envejecimiento cuando tengan que multiplicarse para poder trasplantarse.
- Transformar esas células en células del tipo que necesita el enfermo (células nerviosas, musculares, etc.).
- Realizar el trasplante, sin que haya rechazo y de modo que las células trasplantadas se integren funcionalmente en el enfermo.
CELULA MADRE
Definición: son aquellas células dotadas simultáneamente de la capacidad de autorrenovación (es decir, producir más células madre) y de originar células hijas comprometidas en determinadas rutas de desarrollo, que se convertirán finalmente por diferenciación en tipos celulares especializados.
Las células de esta m.c.i. son pluritotentes, porque aunque por sí solas no pueden dar origen al feto completo (necesitan el trofoblasto), son el origen de todos los tejidos y tipos celulares del adulto.
Hay que aclarar un punto: aunque las células de la masa celular interna del blastocisto son pluripotentes, no son en sí mismas células madre dentro del embrión, porque no se mantienen indefinidamente como tales in vivo, sino que se diferencian sucesivamente en los diversos tipos celulares durante la fase intrauterina. Lo que ocurre es que cuando se extraen del embrión y se cultivan in vitro bajo ciertas condiciones, se convierten en células “inmortales” dotadas de esas dos propiedades de las que hablábamos: autorrenovación y pluripotencia.
Celulas madre en adultos
En humanos se conoce desde hace años, la célula madre hematopoyética de adultos, que reside en la médula ósea y que da origen a toda las líneas de células sanguíneas e inmunes. Aunque se conocen desde hace tiempo células madre en tejidos que, como la sangre o la epidermis, presentan gran tasa de proliferación, solo recientemente se han descubierto células madre en órganos que normalmente tienen una baja tasa de renovación, como es el caso del cerebro.
Así pues, la novedad ha consistido en reconocer la existencia de células madre pluripotentes en otros tejidos y órganos, y aún más interesante, que algunas de ellas presentan la suficiente flexibilidad como para generar células especializadas de otros linajes.
Esto ha supuesto una sorpresa alentadora, ya que aumenta la perpectiva de obtener a largo y medio plazo terapias celulares, sin los problemas éticos asociados a destruir embriones para obtener células madre.